La antedicha prueba es
la más usada, a nivel internacional, para determinar la calidad del huevo a analizar. El manómetro le permitirá delimitar perfectamente el
espesor de la cáscara y la frescura del huevo dependiendo del aspecto de la clara y la yema.
Como herramienta es fundamental ya que la calidad del citado alimento se mide en unidades haugh que son el resultado de analizar el peso de cada huevo y la cantidad, en milímetros, de albúmina que contiene.
Su manejo es sumamente sencillo. Simplemente se debe romper el huevo sobre una superficie plana y aplicar el instrumento sobre la parte más alta del albumen (normalmente a 1 centímetro de la yema) hasta que el palpador entre en contacto con el mismo.
Para determinar la calidad en unidades Haugh debe aplicarse la siguiente fórmula:
Hu = 100 * log (h – 1.7 * p0.37 +7.57)
Donde:
Hu = Calidad del Huevo en unidades Haugh
p = peso del huevo expresado en gramos
h = altura del albumen expresada en mm
El resultado debe ser un valor comprendido entre 20 y 110 unidades Haugh.
Gracias a este micrómetro, esta operación le permitirá saber, de antemano, las unidades haugh de cada producto para poderlo vender de forma directa a sus clientes.